Sinopsis: Sanny y Konny Kornblum, dos hermanos de doce años, son gemelos... pero diferentes en casi todo. Ella parece alérgica al amor, mientras que él se enamora a cada minuto. Sanny lo ha intentado todo para caer enamorada, pero no ha funcionado ni con el chico más guapo del colegio. De modo que los dos hermanos se proponen un reto: dar 1.000 buenos motivos para enamorarse... y para no enamorarse. Mientras tanto, su familia vive grandes cambios, y la casa está siempre alborotada. ¿Podrán Sanny y Konny descubrir el auténtico amor en medio de tanto revuelo?
¿Qué puedo decir de este libro? Comenzaré diciendo que es un libro entretenido, como pueden leer en la sinopsis se centra en la diferencia de opinión de los gemelos Kornblum respecto al amor, aunque también le da un par de vueltas al tema de la familia disfuncional que comienza cuando sus padres deciden cambiar de roles y su madre decide ir a trabajar mientras que su padre se queda en casa para ser quien se encargue de todo, aunque no es necesario esperar demasiado para darse cuenta que aquello no es lo suyo, todo los notan... a excepción de él mismo. Es entonces cuando Sanny y Konny deben comenzar a tomar cartas en el asunto para encargarse de la casa y además de su hermano pequeño Konny -sÃ, al igual que el hermano gemelo de Sanny, pero es solo cosa de apodos ya que Konny "grande" se llama Konstantin, mientras que el hermano menor se llama Kornelius-, eso sin contar a Karl -alias Pushel-, el perro que Konny decide incluir a la familia.